La suerte: ¿llega o hay que salir a buscarla?

En un emprendimiento los ingredientes básicos son la perseverancia, el aprendizaje continuo, la confianza en uno mismo y en los demás y  ¿la suerte?

El libro “La Buena Suerte” de Alex Rovira y Fernando Trias de Bes (que es ideal para leer en el bondi  y en la placita mientras los niñ@s juegan y corretean), tiene algunas reflexiones respecto a la suerte y los suertudos que son muy aplicables al mundo de los emprendedores,.

Estas son:

1) Consturir la suerte: “¡Quién si no! La suerte en general no dura mucho tiempo, pero si hablamos de la buena suerte, la que nace de la responsabilidad sobre la propia vida, ésa dura siempre, porque la creas tú mismo”.

2) Ir en su busca: “Hay mucha gente que quiere tener buena suerte, pero pocos los que deciden ir por ella”.

3) Mirar y aprender de los errores: “Si ahora no tienes buena suerte, tal vez sea porque las circunstancias son las de siempre. Para que aparezca la buena suerte es conveniente crear nuevas circunstancias y es necesario atender los errores (si solo miramos lo correcto estaremos en la misma situación una y otra vez, pero el error puede ser la base del cambio)”.

4) Ser  generoso: “Preparar las circunstancias de la buena suerte no es buscar únicamente el beneficio propio. Éste es uno de los principios más importantes, porque cuanto más damos, más recibimos, es aquello del efecto ‘boomerang’”.

5) No dejar nada para mañana. “Si ‘dejas para mañana’ la buena suerte quizá nunca llegue”.eroso: “Preparar las circunstancias de la buena suerte no es buscar únicamente el beneficio propio. Éste es uno de los principios más importantes, porque cuanto más damos, más recibimos, es aquello del efecto ‘boomerang’”.

6) Buscar en los pequeños detalles, en las circunstancias aparentemente innecesarias pero imprescindibles. “Hay que estar muy alerta, porque siempre hay un pequeño detalle que desvela la esencia del cambio, lo que te da buena suerte puede estar ahí. Si piensas que las cosas pasan porque sí, no ves nada más. Los detalles tienen una capacidad de cambio definitiva, igual que el error”.

7) No preocuparse por el azar. “A los que sólo creen en el azar, crear circunstancias les parece absurdo. A los que crean circunstancias el azar no les preocupa”.

Desconfiar de quien vende suerte. “Nadie puede vender suerte. La buena suerte no se vende”.

9) Ser paciente y perseverante. “Cuando ya hayas creado todas las circunstancias, ten paciencia, no abandones. Para que la buena suerte llegue, confía”.

10) La oportunidad siempre está ahí. “Crear buena suerte es preparar las circunstancias para la oportunidad, pero la oportunidad no es cuestión de suerte o azar. El mundo está lleno de oportunidades pero, claro, hay que buscarlas”.